¡Nos casamos!

Pero antes de ello, ¡nos pusimos manos a la obra! Una invitación especial para dos amigos muy cercanos y con unos conceptos muy definidos para su diseño.

Las invitaciones son de corte sencillo, buscando el blanco como protagonista sobre cartulina al que se añaden una gama de colores muy controlada en los elementos orgánicos, creando de esta manera una estética conjunta en todos los elementos del evento. Siguiendo estas directrices se realizaron otras piezas características para este tipo de celebraciones, como por ejemplo, el misal, el propio menú, sellos o el «sitting» de la boda.